El otro dia bajé a pasear a la mascota de mi madre, una adorable pastor vasco, encantadora y que, por desgracia, está un poco mayor. Hasta aquí puede ser el día a día de cualquiera, pero para mi, fue algo más. Era el día 31 de diciembre después de comer, asi que entre quita, pon, haz esto y lo otro, lleva, trae, mueve,… Os podéis imaginar, un poco caótico, ja ja ja. Si a eso le sumais el estrés de las navidades, dejar todo preparado, los regalos… ¿me seguís verdad? No se porqué me estreso tanto estas fechas, jajaja.
La cuestión es que no sé si el frío congeló mi cerebro, mis ideas (que frío que hace siempre en ese parque), o si fue el precioso cielo que me encontré al levantar la mirada, pero me calmé. Me quedé mirando al cielo, sin pensar en nada y me relajé como hacía tiempo que no me pasaba. En ese momento y no puedo explicar porqué, encontré mi momento de paz. Me tranquilicé, y pude ver las cosas con perspectiva. No se si fue, ver la inmensidad del cielo, las nubes, ver lo insignificante que somos en el universo, o lo bello que puede ser, pero encontré mi punto de equilibrio… y me di cuenta de cuanto lo necesitaba…
Lo dicho, no se porque fue, pero ese fin de año, del año pasado (un año bastante agridulce, por cierto), fue el momento en el que hice las paces con todos mis frentes. Un momento que me sirvió para afrontar el nuevo año con la mejor de mis sonrisas y optimismo.
Un momento de reflexión, para valorar, sentir y tener la convicción de que este año será mejor.
Después de esta reflexión y de la «resaca» de las navidades, ya podéis perdonarme, pero he necesitado algunos días para retomar la rutina, la vuelta al curro, los madrugones…y de ahí, mi semana pasada de relax. Eso si, ya sabéis que nunca descanso y que siempre tengo algo entre manos. En este caso, de nuevo, os traigo una tarta.
Para mi primo, un amante del fútbol y como no, de Athletic de Bilbao, esta tarta de bizcocho de chocolate, con un pequeño león rojiblanco, el escudo del equipo y algún que otro detalle, para que quede claro de que aficcion somos. Espero que os guste tanto como a nosotras comerla.
!Feliz martes y sed felices!